Un sector que representa el 5,5 por ciento del PIB de nuestro país no es moco de pavo. Así parece haberlo entendido Ana Pastor y su equipo del Ministerio de Fomento al ponerse manos a la obra con una iniciativa como la denominada Unidad Logística, que pretende convertir a España en plataforma logística mundial. En este sentido, la cartera de Fomento se ha marcado el objetivo de escalar cinco puestos en el Índice Logístico Mundial que elabora el Banco Mundial y en el que nuestro país ocupa actualmente un discreto vigésimo puesto.
Esta iniciativa de impulso intermodal es, sin lugar a dudas, motivo de aplauso, pero queda ahora por ver de qué manera se plasma en planes y actuaciones concretas. De momento, en el sector se ha acogido con mucho escepticismo y habrá todavía que esperar hasta el mes de junio, fecha marcada para exponer la nueva estrategia. La Unidad Logística nace como grupo de trabajo interno del ministerio que contará con el asesoramiento de un grupo de expertos, integrado por representantes de las principales asociaciones del sector y que responde al nombre de Foro Logístico.
Aquí empiezan las primeras incertidumbres, puesto que la labor de este órgano consultivo es similar, por no decir idéntica, a la que ya desarrolla actualmente la Comisión de Intermodalidad del Consejo Nacional de Transporte. No sería buena decisión poner el contador a cero sobre lo ya avanzado por esta comisión. La Unidad Logística caminará marcada por un calendario de vértigo, con apenas seis meses para poner en negro sobre blanco una estrategia para impulsar la marca logística España.
Es de esperar que el nuevo plan sepa definir las prioridades en un momento de austeridad económica como el que atravesamos, siguiendo el mandato que marca Bruselas en la red TEN-T y obviando todas esas alegrías pasadas que han desembocado en una sobrecapacidad de infraestructuras logísticas (AVEs, aeropuertos, etc).
© 2024, todos los derechos reservados.