Antonio Viñal. Avco Legal.
Una de las fortalezas más importantes del sector es, sin lugar a dudas, el número y la diversidad de las asociaciones existentes
Este año se cumple el XX aniversario de la asociación logística gallega Logidigal, dedicada, entre otras actividades, tanto a la promoción y defensa de los intereses de las navieras, transitarias, consignatarias y transportistas que la forman, como al conjunto del sector.
Un aniversario que pretende potenciar los esfuerzos llevados a cabo durante dos décadas, redoblándolos, si cabe, mediante el impulso de iniciativas relacionadas con la coordinación del papel de todas las asociaciones, la renovación de la composición de los consejos de administración de las autoridades portuarias, el desarrollo de la competitividad logístico-portuaria y el incremento de la formación permanente destinada a los diversos tipos de perfiles profesionales.
Una de las fortalezas más importantes del sector es, sin lugar a dudas, el número y la diversidad de las asociaciones existentes, así como las múltiples y variadas estrategias y planteamientos respectivos, que, salvo excepciones, suelen complementarse de forma razonable entre sí. Ahora bien, esta fortaleza es en sí misma una debilidad, dada la falta de consenso básico acerca de los objetivos generales que pueden y deben trascender a los particulares de cada una de ellas en beneficio de otro común y superior al de todas, el del sector al que pertenecen y el de la economía en la que se insertan. A fin de lograr una mayor potenciación de uno y otro, una mayor coordinación, creando, por ejemplo, foros o equipos transversales de trabajo, podría contribuir a superar esas debilidad a la que me acabo de referir.
La composición de los consejos de administración de las autoridades portuarias, regulada por el artículo 40.1 de la Ley 27/1992, de 24 de noviembre, de Puertos del Estado y de la Marina Mercante, respondió, sí, a los “profundísimos cambios que (afectaron) a los aspectos técnico, económico, social y político” del momento, pero hace tiempo que ha dejado de hacerlo, como consecuencia de una imparable evolución económica y social que ha transformado los presupuestos sobre los que se redactó. Las organizaciones empresariales actuales, que son más de las que había entonces, buscan legítimamente un puesto en el consejo, para lo cual, a reserva de una modificación definitiva de la Ley, cabría poner en marcha de manera provisional un “gentlemens’ agreement” que permitiera una rotación periódica entre todas.
Las fases de planificación, gestión y coordinación de las operaciones relacionadas con el transporte y manipulación de mercancías exigen un entorno altamente competitivo, caracterizado no sólo por una mayor conectividad digital, sino también por un marco regulatorio más abierto, coherente y flexible; por la normalización de los procesos de escala, la simplificación de los procedimientos burocráticos y la agilización de los trámites aduaneros -la implementación definitiva de la Ventanilla Única Aduanera-; y, en fin, por el fortalecimiento de la intermodalidad y la interconectividad portuaria y ferroportuaria. A todo ello, se refirió en su día Logidigal en su “Programa de medidas para un desarrollo competitivo y sostenible del sector logístico-portuario”, y a ello cabría volver a referirse ahora, reiterándolo.
Por último, hay que aludir necesariamente, como decía al principio, a la formación, un tema no menor que se agrava con el paso del tiempo y que exige una toma de posición decidida y eficaz. Para ello es preciso crear ofertas docentes ajustadas a las necesidades empresariales y sociales; impulsar, en particular, la cualificación profesional de grado medio; y promover la formación en competencias transversales. En este ámbito, es necesario resaltar las iniciativas que la Autoridad Portuaria de Vigo viene desarrollando de forma periódica, y que, a mi juicio, deberían de servir de base para desarrollar otras de mayor alcance y contenido, en línea con la demanda y la expectación que las mismas han despertado en las últimas convocatorias, y en las cuales Logidigal ha colaborado de forma destacada.