El +25% de México y Canadá, + 10% a China… guerra comercial en el horizonte
Trump en X el 25 de noviembre: “en mi primer día como presidente voy a imponer un +10% al arancel contra China, y un +25% a México y Canadá”. Y aquí vamos otra vez…
La guerra Motos-Broncano que le mantuvo a usted en vilo la semana pasada será un baile de arrumacos comparada con la que está preparando el trampero Donald. Al parecer, al anaranjado se le ocurre que las fronteras están “demasiado abiertas” al comercio, que esto trae más inmigrantes ilegales y más fentanilo, y que la solución es subir los aranceles. Un razonamiento en la línea del que defendía una muy querida señora mía (QEPD), y que reventaba la mesa de la comida: “desde que los americanos subieron a la luna, el tiempo ya no es el mismo”. Y deja caer el micrófono.
Primeras consecuencias para lo que nos afecta a nosotros, los del transporte: los volúmenes en el puerto de Los Angeles disparados para aprovechar los últimos estertores de Biden, y los fletes en niveles pandémicos. Las grandes navieras ya buscan millones de hectolitros de pintura anaranjada Pantone Donald para pintar sus cascos, y los forwarders del mundo también. Usted, importador estadounidense, y usted, consumidor de Milwaukee, lo sufrirán en inflaciones. Y usted, exportador gringo, y usted, operario de cadena de producción de la General Electric de Wisconsin, lo sufrirán en madrazos de los mexicanos cuando ellos, a su vez, suban sus aranceles. (La Dra. Sheinbaum ya se ha quitado la chancla cuando escribo esto).
¿Y aquí? ¿Qué pasará aquí? La última vez que estuvo Trump en la “Uaite Jaus”, los industriales europeos se tiraban de los pelos porque la capacidad balística de contraataque tarifario de la UE se centró en productos ultrademandados en Europa: motos Harley-Davidson, vaqueros Levi’s, y bourbon de Kentucky… ¿En serio?
Javier Miranda Descalzo
javier.miranda@grupoxxi.com