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Baleària se mantiene a flote gracias al transporte de mercancías

La naviera solicita al Gobierno una exención de tasas portuarias tras reducir sus ingresos un 70% como consecuencia del estado de alarma en España.

La naviera Baleària ha solicitado al Gobierno una exención de tasas y cánones y del pago de los servicios portuarios como consecuencia del estado de alarma decretado en España desde el pasado 14 de marzo fruto de la crisis del coronavirus.

La compañía, que preside Adolfo Utor, experimentaba al cierre de esta edición una caída de sus ingresos de un 70 por ciento al haber perdido en su negocio el tránsito de pasajeros y tener sólo 12 de sus 32 buques operativos en sus servicios entre Península, Islas Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla. La naviera ha reducido sensiblemente sus volúmenes de carga en todas sus líneas regulares.

Un ro-pax de la naviera Baleària en el puerto de Valencia.
Un ro-pax de la naviera Baleària en el puerto de Valencia.

Con la entrada del estado de alarma Baleària activó un plan de contingencia para garantizar el transporte de mercancías a las Baleares, Ceuta, Melilla y Canarias y permitir que se recibieran los suministros de productos esenciales ante la situación de alerta sanitaria provocada por el Covid-19.

Al cierre de esta edición, la naviera mantenía las conexiones diarias en todas sus rutas para carga con una reducción del número de salidas pero garantizando el abastecimiento de productos esenciales, un aspecto logístico que está resultando vital en la situación de estado de alarma derivado de la crisis sanitaria por el coronavirus, según ha explicado la empresa a TRANSPORTE XXI. El transporte de mercancías está permitiendo a la naviera mantenerse a flote en días de mala mar.

En una tribuna abierta a las autoridades, publicada en www.transportexxi.com, Utor exige al Gobierno de Pedro Sánchez la misma preocupación para las navieras que están demostrando por las compañías aéreas y asumiendo que “el transporte mixto de pasajeros y mercancías es estratégico y esencial”.

Utor señala que “en pleno descalabro de ingresos, facturar servicios portuarios como prácticos, amarradores, estiba, remolcadores, tasas y cánones, en ocasiones abusivos e innecesarios es una incongruencia difícil de entender”. Según el empresario, “el flete ingresado no alcanza ni para el abono de estos servicios portuarios”, dado que la compañía sigue manteniendo los servicios marítimos de carga para el suministro de artículos de primera necesidad “en condiciones complicadas, a costa de sufrir pérdidas”.

El presidente de Baleària indica que Puertos del Estado y las Autoridades Portuarias deben seguir el paso del gobierno de Baleares que ha decretado la exención de tasas en el puerto de Ciutadella, en la isla de Menorca.

Adolfo Utor, presidente de la naviera valenciana Baleària.
Adolfo Utor, presidente de la naviera valenciana Baleària.

La situación ha obligado a la naviera a presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) ante el Ministerio de Trabajo, que afecta al 30 por ciento de los empleados del grupo Baleària, 544 personas. El expediente se aplica desde pasado 1 de abril y se mantendrá hasta que desaparezcan las restricciones en el transporte marítimo de pasajeros. La empresa ha garantizado que complementará el sueldo del personal afectado con el fin de que su retribución salarial total no se vea modificada en abril.

Baleària venía cosechando ejercicios positivos en los últimos años. En 2019 aumentó un 6,8 por ciento los embarques de camiones en sus servicios ro-pax, que transportaron 6,1 millones de metros lineales, el equivalente a 466.000 camiones, de los que un 24 por ciento eran productos alimentarios y un 23 por ciento era grupaje industrial. El 83 por ciento de la carga se realizó en rutas nacionales y un 17 por ciento en el negocio internacional. El 75 por ciento de todas sus mercancías se manipularon en las líneas abiertas entre los puertos de Valencia, Dénia y Barcelona con las Islas Baleares. Ingresó una media de alrededor de 400 euros por cada camión embarcado.

La compañía registró un volumen de negocio por transporte de mercancías de 185 millones de euros en 2019, el 41 por ciento de la facturación global de la naviera que recaudó 266,8 millones de euros en el capítulo de pasaje, según apuntan desde Baleària.

El pasado año fue relevante para la naviera al consolidar la línea entre Huelva y Canarias, una vieja aspiración de la compañía, iniciada en 2018 junto con Fred. Olsen Express, servicio para el que adquirió 74 remolques portacontenedores.