Maersk pondrá en marcha, con tracción de Captrain, una conexión ferroviaria entre el puerto de Barcelona y el sur de Francia con una periodicidad de tres frecuencias semanales a Toulouse y una a Lyon a partir de noviembre.
El primer corredor en ancho de vía internacional (UIC) que conecta el puerto de Barcelona con Europa gana un nuevo cliente. Maersk ha anunciado un servicio de contenedores entre la dársena catalana y el sur de Francia, que pondrá en marcha a través de su filial APM Spain Railways.
La conexión ferroviaria, con tracción de Captrain, tendrá una periodicidad de tres frecuencias semanalmente con Toulouse y una con Lyon desde principios de noviembre. Desde Toulouse, habrá la opción de conectar con otros servicios ferroviarios hasta Burdeos.
Para esta oferta, Maersk se ha aliado con Naviland Cargo, perteneciente a SNCF, al igual que Captrain. El operador intermodal especializado en el contenedor marítimo ya anunció en junio que entraría directamente en el mercado español antes de finalizar el año.
El nuevo servicio “reducirá los tiempos de tránsito de la carga marítima con destino a las zonas de Toulouse, Burdeos y Lyon, utilizando Barcelona como puerta de entrada alternativa”, señala un comunicado de Maersk. La nueva oferta puede acortar los tiempos de tránsito para la carga de importación y exportación a estas áreas francesas hasta en 12 días (7 días de promedio) “en comparación con las rutas tradicionales a través de puertos franceses o del norte de Europa”.
Esta apuesta ferroviaria no se quedará en el puerto catalán a este lado de Los Pirineos. El objetivo es “ampliar la conectividad ferroviaria del lado español a las zonas de Tarragona y Zaragoza”. Captrain traccionará el servicio con las nuevas locomotoras fabricadas ex profeso para el UIC, que estrenó con la autopista ferroviaria de VIIA, también perteneciente a SNCF, entre Can Tunis, junto al puerto de Barcelona, y Luxemburgo. La empresa ferroviaria opera otros servicios por el corredor en ancho de vía internacional.