Carretera  | 

Conquistando territorios

El crecimiento del tráfico marítimo por la crisis del mar Rojo provoca que los transportistas del puerto de Algeciras tengan que alargar sus estructuras operativas para cubrir las necesidades de la cadena de suministro.

“Un año para la esperanza”. La frase resume la opinión de empresarios y directivos de la logística y el transporte con actividad diaria en el puerto de Algeciras. El tráfico de contenedores import-export crecía en el inicio del último cuatrimestre de 2024 a un ritmo del 3 por ciento, con una mejoría mayor en las exportaciones y con unas sensaciones de los transportistas locales que se mantienen en positivo.

El sector venía de “un frenazo” en los últimos cuatro meses de 2023, indica un transitario local, con un arranque del ejercicio 2024 “bastante descafeinado”.

Operaciones terrestres en el puerto de Algeciras.
Operaciones terrestres en el puerto de Algeciras.

El impulso de navieras como Maersk, Hapag-Lloyd, MSC, HMM, CMA CGM, ONE y Cosco, entre otras, está siendo fundamental para la generación de nuevas oportunidades en el enclave andaluz. Sus flujos se han retroalimentado desde la decisión de los armadores de no realizar una gran parte de sus viajes por el canal de Suez.

Un veterano empresario del enclave explica que “pensábamos que 2024 iba a ser un año de tragedia, complicado y difícil para las flotas, ya que el consumo estaba bajando y se estaba notando en el número de viajes, pero ocurrió el problema de la crisis del mar Rojo y los buques cambiaron sus rutas. La situación ha mejorado mucho”.

Y es que esta crisis ha premiado a Algeciras por su situación geográfica. Sin embargo, los transitarios reconocen que “no tenemos mucha más capacidad para crecer, porque las navieras ya no pueden apretar más los algoritmos para reducir la estancia de los contenedores de tránsito”.

Explican que “los patios y líneas de atraque son los que son” y, en esta coyuntura, varios empresarios coinciden en señalar que “hay que crecer en Isla Verde para dar una mayor cobertura a los tráficos, lo que se hace urgente con la crisis actual. Necesitamos capacidad en la zona”.

Pese a la bonanza actual, fuentes del sector reconocen que “el escenario actual y el de 2023 no son comparables con 2022, que fue un ejercicio espectacular”. En el citado año “hubo mucho volumen, el paro de transportistas y se lograron subir los precios, aparte de las ayudas”, explica el directivo de una naviera.

El año 2024 arrancó con tibieza, “porque diciembre, enero y febrero son meses de bajo consumo”, pero “desde marzo no hemos parado con todos los buques que han venido por el desvío por Buena Esperanza”. Flotistas avanzan que “estamos transportando contenedores que antes iban por otros puertos del Mediterráneo, porque el primer puerto europeo es Algeciras y al cargador que le corre prisa, prefiere bajarse aquí”.

Hoy, el sector otea el horizonte con esperanza y conquistando nuevos territorios, porque “nos debemos a la cadena de suministro y si tenemos que llevar un contenedor a Francia o Portugal por carretera porque no hay otra solución desde Algeciras, pues lo estamos haciendo, algo que antes no pasaba”.

Soluciones urgentes

Las demoras de los tráficos de Extremo Oriente se han incrementado en diez días por el desvío por África, “lo que hace de Algeciras un enclave estratégico para descargar la importación si el cargador no puede aguantar y elige la carretera”. La otra opción es “aguantar en Algeciras una semana o más y salir por vía marítima”.

Eso sí, a la hora de poder atender con garantías las peticiones de navieras, transitarios y cargadores, los flotistas consultados explican que “cada día es más complicado por la falta de chóferes, aunque estamos en un sector que, dentro de la larga distancia, es el más apetecible porque los conductores duermen muchos días de la semana en su casa y eso el trabajador lo agradece”.

Estos medios indican que “nos viene mucho conductor rebotado de internacional, donde cada día está más complicada la conciliación”. En el enclave viene trabajando una flota de más de 1.000 camiones.

Empresas y autónomos gestionaron en 2023 un flujo de 437.385 TEU. El puerto cerró el año con un descenso del 3 por ciento en sus tráficos de contenedores llenos de import-export. El objetivo de los operadores es que el enclave vuelva a recobrar la cifra de los 450.000 TEU anuales, un objetivo que se podría volver a conseguir al cierre del presente ejercicio.

Viajando hacia una mayor magnitud

El Puerto de Bahía de Algeciras ha logrado reunir una destacada oferta de empresas de transporte por carretera, un tejido empresarial local que viene dando salida al crecimiento de los tráficos import-export en el enclave. El sector, que avanza año tras año en mayor magnitud, está formado por firmas locales y autónomos, junto a flotistas y agencias dedicadas al transporte de contenedores por carretera, con sedes sociales en Badajoz, Sevilla, Córdoba, Málaga y Cádiz, que operan con regularidad en las terminales portuarias de Algeciras.

Este conjunto empresarial registró un volumen de negocio de 303 millones de euros en 2022, según un estudio realizado por Transporte XXI con los datos de 28 compañías. Estas ventas suponen un incremento en la facturación del sector del 24 por ciento respecto a los 243 millones de euros registrados por las mismas compañías en el ejercicio precedente, según los datos obtenidos por este periódico.

La expansión del negocio del transporte portuario viene de la mano del crecimiento del tráfico de contenedores en el enclave del Estrecho. En 2022, la dársena experimentó un aumento del 7,4 por ciento en los volúmenes de importación y exportación de contenedores llenos, con un movimiento de 451.000 TEU, dentro de los 816.998 TEU gestionados por las terminales del enclave en la operativa de comercio exterior.

Más información en la edición impresa del 1 de noviembre de 2024