La logística ya es clave

De lo que estamos hablando realmente es de competitividad de las empresas en un mundo globalizado

Hace solo unos días, Santiago Tarín, uno de los gurús del headhunting en este sector, lo dejó muy claro en una jornada de UNO: “el director de logística ha pasado a ser clave en el comité de dirección de las compañías. El paso lógico será que pase a convertirse en CEO”. Esta frase viene a ratificar una situación de cambio profundo que están viviendo el tejido productivo y nuestro sector.

La historia refleja que el mundo de las empresas ha ido pasando por diferentes etapas, cada una de ellas liderada por una función prevalente. Desde los inicios, donde lo importante era la fabricación, pasando por las ventas, el marketing, las finanzas en las épocas de crisis, hasta llegar a la actual, donde la ventaja competitiva es la logística, con el apoyo de la digitalización.

De hecho, en este momento, el director de logística no se responsabiliza solo de minimizar costes y optimizar el rendimiento, sino que, además, se encarga de generar valor en los diferentes recursos de los que dispone la empresa: capital, materias primas, energía o maquinaria, y también del análisis y la atención del cliente. El director de logística de electrodomésticos Beko, Birol Pamukcu, lo dejó claro también en la mencionada jornada: “podemos entender a los consumidores para responder a sus cambios de hábitos y reaccionar rápido”.

Para esta fabulosa nueva misión de la logística contamos con el aliado necesario de las nuevas tecnologías, que han surgido como un volcán también en nuestra área de trabajo donde, además, se nos exige actuar con criterios medioambientales nunca exigidos hasta ahora.

Como suele decir el prestigioso director de logística capilar de Calidad Pascual, Pedro Marín, “hablar de logística es hacerlo de sostenibilidad, tanto social como económica y medioambiental”. Es decir, que están muy bien esos manoseados lugares comunes de la resiliencia o los ecosistemas colaborativos, pero de lo que estamos hablando realmente es de competitividad de las empresas en un mundo globalizado, en el que el cliente final quiere un producto cada vez más personalizado, en muy poco tiempo, en una dirección concreta y con una experiencia de compra y entrega agradable.

Ante este panorama, es lógico que el talento logístico sea ahora uno de los más buscados.

Francisco Aranda

presidencia@unologistica.org